12 de octubre de 2012

Los leones del asfalto



Alzas la vista al cielo e imaginas cómo sería, por una vez, alcanzar esas estrellas que tan lejos divisas desde tu propia pequeñez. Vuelves la vista, alcanzas a ver tus pies, y los sientes fríos en un asfalto que lleva a otros tantos como tú al destino que ha elegido tu vida. Unos trajeados, portan maletines asépticos e inmaculados de cuero esperando que esa mañana no se les alargue la reunión lo que dura en enfriarse su primer café matutino. Hombres embutidos en monos azules, que avanzan raudos con su tartera a los cimientos de un fortín de ladrillos, argamasa y grandes hormigoneras. Señoras, y señoritas, engalanadas con sus faldas de raso, unos zapatos charol y a un paso ligero que marcan sensualmente los ritmos a los que se les vuelven las miradas de los transeúntes.

 Y ahí estás tú, los ves a todos… Mientras la cola jamás avanza…